Nos pasamos media
vida esperando,
la otra abriendo las manos,
recibiendo.
Dejamos que el tiempo
pase como el viento,
sin inmutarnos
ante todo lo que se lleva.
Miras a la gente
pasar por las calles,
ciegos, distantes
y sin empatía.
Convertidos en individuos
con su mundo propio,
incapaces de interconectar
en un universo anárquico.
Perdidos en una sociedad
desecha,
sin un objetivo común
por el que avanzar.
Creyendo en un efímera
libertad individual,
ajena a las ilusiones
de quienes nos acompañan.
Acompañantes de viaje
considerados casuales,
una decepcionante mirada
que no aporta nada.
Aportar, cinco letras
intrínsecas a la evolución,
cual forma de crecer
y embadurnarnos de sabiduría.
Enriquecernos,
es el agua que nos hace crecer,
que nos sacia las inquietudes
y provoca sonrisas.
By Clemente