Somos resultado de nuestros pensamientos y decisiones,
con luces y sombras, mostrando nuestro verdadero espíritu.
Resultado de aceptar las contradicciones con que vivimos,
siendo autocríticos con lo que vemos en el espejo.
Un espejo sin censuras, con la mirada coherente del corazón,
donde cada latido es la defensa de lo que pensamos.
By Clemente