La historia no forma parte de nuestro universo,
la consideramos algo inútil y envejecido.
Los dramáticos hechos de un pasado de terror,
no han servido de aprendizaje ni evolución.
Volvemos a tener una excusa para señalar,
y con un dedo indicar a quien expulsar.
Viejos hábitos de oscuras intenciones,
con la complicidad de nuestros aplausos,
vuelven a impregnar mentes de corto recorrido.
Los dictadores son criados y cobijados,
por sociedades donde se vanaliza la libertad.
Recordemos que todos podemos ser sañalados,
pues el miedo a la diferencia se convierte en odio.
By Clemente