Existe una energía interior latiendo,
a la espera de su momento.
Una luz capaz de irradiar su fuerza
y belleza con inmensa intensidad.
Quizá un instante la liberará,
una explosión de alegría inmensa.
La pasión, es el alma de nuestro corazón,
motor de la conquista de la vida.
Núcleo de los impulsos de las ideas,
pensamientos o sentimientos.
Sin pasión, nos falta chispa o alegría,
conviertiendo el rostro en pétreo.
Cuando surge la pasión no paramos,
nos ilusiona cada brisa o suspiro.
Conseguimos descubrir los sentidos,
cuales sonidos de nuestra alma.
Persibimos cada energía con intensidad,
cual huella de un corazón liberado.
Con pasión los obstáculos no son insalvables,
son incertidumbres por afrontar y conquistar.
Apasionados, dejamos el pasado como anécdota,
abrazando la evolución que nos transformará.
Una estrella que nos hace resurgir de laa cenizas,
alzando la vista y mirado al frente sin concesiones.
By Clemente

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