Nacidos de un volcán,
guerreros se levantan.
Corazones de tierra
y fuego,
forjados en valles
frondosos.
En pie ante
acantilados,
esculpidos
por el mar.
Bravos como las olas,
y hospitalarios
como los delfines.
Viviendo en ochos islas,
surgidas de las profundidades.
Ocho islas con latidos
de un continente
sin fronteras.
Islas de un atlántico
embravecido,
iluminadas con sonrisas
de estrellas.
Volcanes expulsando
su manto de lava,
regenerando y creando
vida perpetua.
Barrancos labrados
por las lluvias,
recorriendo las cumbres
hacia las costas.
Ocho gotas distintas
florecen,
de las entrañas
de la tierra.
Ocho gotas hogar
de un pueblo,
con orgullo
de gigante.
Siempre diremos,
soy de aquí,
aún en las antípodas
del planeta.
Siempre soñaremos
con volver,
a nuestros bosques
u oler la brisa del mar.
Siempre cantaremos
con el corazón,
y las manos tendidas
símbolo de unión.
Nos preguntarán
y sin dudar diremos,
Canarios somos
y siempre seremos.
Ser Canario
no es una religión,
es el carácter
de vivir con pasión.
Nadie nos regaló
nada ante la adversidad,
reinventarse recorre
por nuestras venas.
En medio de cuatro
continentes,
la bandera
de la libertad
no dejará de ondear.
En honor a las Islas Canarias.
By Clemente